martes, 28 de junio de 2011

Viaje sin regreso

La ilusión de volver. La torpe ilusión de pensar que el regreso es posible. Ya la tuvo Odiseo en la Odisea. Pero la ciudad que encontró no era la misma que dejó. Penélope tampoco estaba igual. Los senos caídos, la pena acumulada, los ovillos de lana rodando por el suelo. No hay marcha atrás. Ninguna experiencia vivida es recuperable ni siquiera en partes. La ilusión de volver. La torpe ilusión de pensar que el regreso es posible. Pero incluso si hubiera o hubiese un retorno, ¿adónde volvería exactamente el obstinado viajero?
L.

No hay comentarios:

Publicar un comentario