Leyendo algunas reacciones generadas por la difusión de los resultados del concurso (enojos, decepciones, autocríticas por mail o al pie de los posteos) pensé que perder un certamen literario no significa nada. El mayor poeta del siglo XX (Fernando Pessoa) salió segundo en el único concurso al que se presentó. Kafka (el más grande de todos) no compitió en ninguno. El gigante Borges no ganó el Nobel de literatura. Freud, padre del psicoanálisis, no recibió ningún reconocimiento por su aporte al conocimiento del alma humana. Ganar o perder nada tiene que ver con la creación en cualquiera de sus formas. Sólo vale el acto erótico de ser y escribir por el solo placer de hacerlo. Si eso es reconocido socialmente (o no) carece de toda relevancia. ¿Quién es un jurado para decidir sobre calidades, jerarquías y estilos? ¿Acaso existe un modelo estético a seguir? Deberíamos escrivivir sin esperar recompensas. ¿Amamos para casarnos? Sería muy triste. ¿Caminamos por la playa a cambio de algo? Más triste aún. ¿Cobraremos a Dios por un beso o un abrazo bien dados? Si existiera tal señor nada pagaría. Los concursos son meras excusas para escribir algo (optimismo en la acción) y lo demás son circunstancias que a lo sumo pueden alimentar algún ego. Mi humilde deseo para 2010 es que aprendamos de una vez a vivir por vivir. Sin para qué ni para quién. Y por amor a la vida.
L.
L.
Tenés razón, Luis. Preguntarse para qué hacemos algo es absurdo. Además esa pregunta no tiene respuesta. Vivir por vivir es buena consigna para 2010. Un abrazo. René.
ResponderEliminarSócrates decía que el premio de toda buena acción es haberla realizado y asocié esa idea con la de Luis al hablar del "optimismo en acción" al liberar ésta de la recompensa o del objetivo cumplido. El amor a la vida es una fuente de creatividad y en este caso generó en quienes nos convocaron esta propuesta que nos permitió encontrarnos compartiendo el amor a la escritura y la oportunidad de descubrir nuevos textos valiosos.Comparto el deseo para 2010 de que aprendamos a vivir por vivir.
ResponderEliminarGraciela B
¡Totalmente de acuerdo! ¿Cuantas hermosas poesías se habrán escrito y nunca se hicieron publicas ni siquiera? Esta sociedad basa todo en el reconocimiento publico, pero la pasión verdadera no busca fama.
ResponderEliminarVivir por vivir... y entonces para que el concurso?
ResponderEliminarLuli
El concurso -como digo arriba- ha sido una buena excusa para promover la escritura y despertar inquietudes en casi cincuenta personas. Conseguimos eso con creces. Los ganadores tendrán premios (modestos pero premios al fin). Lo que intenté decir es que la creación -la vida en general- no pasa por los concursos o las carreras de cualquier tipo. A lo que agrego ahora dos preguntas más para seguir pensando, ¿qué significa tener éxito en la vida? ¿Y qué haber fracasado? ¿Alguien puede decírmelo?
ResponderEliminarLuis Gruss
Creo que fue Freud el que decia que en esta vida para ser feliz hay que ser idiota o hacerse el idiota.¿ no estaba en este blog esa
ResponderEliminarPara mí son sólo circunstancias de las que hay que cuidarse para no caer en la depresión o en la soberbia ya que todo depende del cristal con que se mire. A veces el éxito es el primer paso hacia el fracaso cuando no se vive con humildad y a veces el fracaso es el gran estímulo para alcanzar el éxito. Los impresionistas fueron rechazados innumerables veces de la Academia de París, también sabemos como terminaron Jesús y Gandhi o el pobre Bizet que murió creyendo que su Carmen era un fiasco. En cualquier caso dieron lo mejor que tenían y lucharon por lo que creían sin poner en el otro su valía por eso insistieron y resistieron la adversidad. Suelo huir de las palabras que encierran valoraciones absolutas como éstas para un concepto tan maravilloso como la vida. Para mí la vida es superación, intentos, caídas, logros, alegrías, dolores, sueños. Transitar, transformarse, volver a empezar y creer en el otro, en el mañana, en mí. Como decía Madre Teresa, la vida es vida.
ResponderEliminarGraciela B
Gracias por tus palabras, Luis. Tomo tu deseo de aprender a vivir por vivir pero el amor a la vida también incluye los desafíos. Sigo participando.
ResponderEliminarPensaba en una interpretación de una analista de hace muchos años: "se pueden hacer grandes cosas en la vida, entre ellas una gran boludez".
ResponderEliminarBuena convocatoria, 50 personas escribiendo y cuántas más intentándolo!...me encantó
Podría ser una obviedad pero a veces las ideas más sencillas son las más difíciles de vivir.
ResponderEliminarLlevo siglos preguntándome qué es el éxito.¿ser gerente, escritor que publica libros, madre antes o después de los cuarenta?¿poder ahorrar todo el año y salir de vacaciones?¿aprobar las materias con honores?¿vender muchas entradas y que no se muera nadie en el recital?
El éxito es de procedencia dudosa y es parte de la norma en la que no se acomodan los espíritus rebeldes ni las mujeres salvajes.
Sin duda el mejor premio sería transitar el arte de vivir por vivir.
e
Ojala vuelvan a hacer otro concurso, creo que la gente se copó
ResponderEliminarÉxito o fracaso: veredicto después de medir con una vara. Es cuestión de perspectiva. Sentirse exitoso o fracasado es cuestión de actitud. Por qué meter al concurso en esos terrenos…¿Para qué el concurso? Para lo que le dé la gana a cada quien. A mi me funcionó para sacarme de encima 1.500 letras que camuflajeaban episodios pasados, para volver a subirme al tren, para sentir las vías, para recordar a alguien que ví una sola vez y sorprenderme de ese recuerdo... Para pensar y reconocerme(eso a mi).
ResponderEliminarF. (Desde Tijuana, México)
El éxito es propio y completamente personal, si lo reconocen los demás es un "doble" éxito, pero basta con el propio. Siempre intento buscar un progreso, aprender, entender, aún en los desaciertos sin tomarlos jamás como fracasos.
ResponderEliminarMi éxito es sentirme satisfecha conmigo. En paz por haber realizado/escrito/vivido algo que me inquietaba y no lograba definirlo. Cuando lo puedo plasmar (una vez cada tanto me sale), pierdo por un rato esa sensación molesta y ansiosa de que se me escapa el tiempo.Recién entonces descanso al dormir.Ese es mi éxito.Breve.Escurridizo.
ResponderEliminar¡Me anoto para el próximo!
Además si no ganás te ahorrás la vergüenza de no saber cómo aceptar el reconocimiento. Al menos que uno sea Miguel de Unamuno. Leí el otro día que cuando el rey Alfonso XIII le entregó una distinción él le dijo: 'Gracias, Majestad, me lo merezco'. Y cuando la alteza le dijo que todos los anteriores le habían dicho que no lo se merecían, agrego: 'Y tenían razón'.
ResponderEliminarQué grosso miguelito...
ResponderEliminarPatomagno