viernes, 28 de junio de 2013
Los felices
Los felices tienen trabajo, pareja, cama, viajes, dinero, comida, amor, clamor y alegría. Por eso justamente son felices. Porque no les falta nada. Están tranquilos y todo para ellos va hacia adelante. Cada día es una nueva pincelada en el bellísimo cuadro de la existencia. Cada noche una promesa. Cada beso una fiesta para los sentidos. Los felices tienen espuma de mar entre las piernas y sólo llueven esmeraldas y flores de alabastro sobre sus cabezas llenas de ideas felices y plenas. Pero basta una pequeña ola, un cambio de rumbo, un detalle menor que no había sido observado a tiempo para que los felices se derrumben un día o una noche para siempre. Convendría pensarlo. Quizás sea mejor no conocer la felicidad y conformarse con alcanzar esa luz efímera y doliente que llamamos vida.
L.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario