viernes, 20 de noviembre de 2009

Ver el mar


Alguien me ordenó que mirara hacia otro lado y eso hice. Ya no recuerdo lo que vi. Luego me pidieron que dijera esto, aquello y lo de más allá. Y obedecí. Pero mis palabras se perdieron en el ruido y la locura. Me exigieron entonces que observara una pantalla gigante. Y que no olvidara las tetas de Luciana Salazar. Pero tuve sueño y me dormí. Al despertar volvieron a pedirme que mirara hacia otro lado. Yo quiero ver el mar, les dije sin pensar. Perdí la vida mirando hacia otro lado. Y yo quiero ver el mar, les dije.

L.

2 comentarios:

  1. Es cierto. Mirar hacia donde queremos mirar pasó a ser un acto subversivo. Gracias. Mika.

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  2. Muchas razones pueden habernos adormecido pero siempre que hacemos lo bueno pudimos haber decidido lo malo. Es nuestra decisión. Manternos alerta y conocernos puede ayudar a no enviciar nuestras decisiones y si lo estuvieran saber al menos porqué aceptamos que así fuera. Puede haber una buena causa. Luciana es muy bonita pero no habría que cambiarla por ver el mar.
    Graciela B

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