Vocaciones

Las vocaciones, los amores, los rumbos y la rumba colombiana se van armando como resultado de una mezcla imprevista de causas y azares. No hay predeterminaciones fijas e inamovibles. No hay una orden del destino. No hay eso que a tal o cual persona la marcó desde siempre. Las vocaciones, los rumbos, los amores y la rumba colombiana son cosas que aparecen distraidamente como el viento. Y que en cualquier momento pueden cambiar. Nada está escrito en ningún lado. Y si está escrito intervienen las aguas de los ríos, la caca de perro, los hilos de una tela de araña, cualquier cosa que aparece de pronto como un avión, una avispa, un sol, una azafata.
L.