domingo, 22 de enero de 2012
Sexo y verdad
Adán y Eva perdieron su Edén cuando mordieron la fruta del árbol del conocimiento. A partir del acto rebelde la desnudez y todo lo demás se volvió problemática para ellos. Agamben observa algo parecido en un cuadro de Tiziano, La ninfa y el pastor, donde se ve a una mujer desnuda junto a un campesino. Todo parece indicar que acaban de tener sexo, como se dice modernamente, y que ingresaron en un estado de vacío, de tedio, de nada. Agamben supone que luego del acto carnal los amantes pierden el misterio que tanto los atrajo. Pero lo que sigue es lo que importa. ¿Por qué? Porque lo que sigue es la verdad. Porque no se puede amar lo que se ignora.
L.
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