miércoles, 18 de enero de 2012

Una relación pornográfica

En la Argentina se la conoció como Una relación particular. Pero el nombre original de este imprescindible film del francés Fréderic Fonteyne es Una relación pornográfica. La película se limita a relatar el encuentro erótico de una pareja obsesionada con algo muy especial. No importa qué. Lo hacen todos los jueves, un día previamente convenido por ambos, en el cuarto de un hotel. Sólo con el tiempo los protagonistas descubrirán que el sexo es alma y que el alma, precisamente, tiende sus trampas. Lo mismo ocurre en otros dos filmes que funcionan como antecedentes directos. Uno es Último tango en parís, un clásico de Bernardo Bertolucci, y el otro es El imperio de los sentidos, la durísima fábula del japonés Nagisha Oshima. En todos sobrevuela la desoladora idea de que el sexo, reducido a lo absoluto, acaba destruyendo a los amantes o, al menos, al vínculo intenso y poderoso que habían procurado establecer. 
L.

No hay comentarios:

Publicar un comentario