Los viajes están sobrevalorados. Es conveniente cambiar de escenario, aconsejan los amigos. Se ve en la ruta o en la playa algo parecido a la liberación. Se ve sobre todo la solución de los conflictos. Mucha gente sola viaja suponiendo que 500 kilómetros más allá dará con una especie de salvavidas con forma humana. Muchas parejas en problemas apuestan al viaje como curación de amplio espectro. Quizás en Río de Janeiro todo fluya mejor...No lo veo así. Viajar es lindo como descubrimiento. Y en lo posible bien acompañado. Pero lo demás es un mito. Una frase lo resume todo. Viajero donde vayas no encontrarás nada que no lleves contigo.
L.
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