jueves, 21 de abril de 2011
Libros raros en la feria
¿Por qué ir siempre a lo seguro? ¿Por qué no caer de una vez en lo inseguro de altísima y segura calidad? El retrato de Zoe y otras mentiras, por caso. Podés conseguirlo en el stand del Fondo de Cultura Económica. Recuerdos, deseos y mitos que concluyen siempre en el misterio. Sólo el espacio vacío engendra la esencia de la forma creada. Su autor es el mexicano Salvador Elizondo (1932-2006). La ribera, novela de Enrique Wernicke (1915-1968), cuenta la la historia de un hombre que deja todo y va a vivir cerca del río. Wernike es un "maldito" de la literatura argentina. Podés conseguirlo en Capital Intelectual (pabellón verde-stand 1414) donde también pueden obtenerse mis ensayos El silencio y Lo inalcanzable que son rarísimos pero dignos. A quienes les gusta calentarse leyendo libros de calidad deben buscar Hombre sentado en el pasillo y Mal de la muerte de Marguerite Duras (Tusquets); después me cuentan. Hay un libro de Raymond Carver (1939-1988) cuya lectura es casi obligatoria. Se llama Sin heroísmos por favor. Lo más probable es que lo encuentres en el stand de las librerías Guadalquivir. Ahí también hay un libro muy pero muy raro que reúne la poesía completa del autor de Catedral y Tres rosas amarillas. Se llama Todos nosotros. Me lo agradecerás en esta vida y en las que siguen. Es posible que ahí tengan también Prosas apátridas del peruano Julio Ramón Ribeyo (1929-1994). Lo más raro es lo más hermoso.
L.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario