Abajo la tristeza, leo en una revista de psicología positiva. Abajo el bajón. La depresión. La melancolía. Alegría, capitalismo, consumo o muerte. Así pretenden educarnos los podridos poderes del mundo. En la ilusión de que la angustia puede ser suprimida en el shopping o en el bar Locos por el fútbol. Pero desde los primeros instantes de nuestra existencia sabemos que no hay vida sin angustia. Los sabios admiten que debemos entregarnos al abismo si queremos emanciparnos y salvarnos de caer. Angustia viene del latín -deriva de angustus-: apretado o estrecho. Se podría traducir como desfiladero estrecho. Para Freud la angustia es una protesta desaforada ante lo que se vive como injusto despojo. Recapitulemos: desfiladero estrecho por donde - desde el amor y la palabra- nos rebelamos contra el agravio que ningún Tinelli alcanza a amortiguar. La angustia no puede ni debe ser suprimida. La angustia es anticapitalista y revolucionaria. Y vivir es dejarse afectar por ella.
L.
Agradezco a Marcelo Percia por darme la idea oculta que preside este posteo.
"Tenemos esa rara posibilidad de hablar por nosotros mismos"
ResponderEliminar"El amor se adelante al amor, pero ese anticipo ilusionado no tiene garantía de acierto."
Marcelo Percia
Allí donde está la angustia: estamos. Esa búsqueda es el gran desafío.
además, pocos sentimientos son tan sinceros como la angustia; que se escabulle en nuestra cara, en nuestro andar, en nuestros ojos. es inocultable.
ResponderEliminar(:
un beso Luis, seguiré leyéndote
Entonces, superar o, mejor dicho, tratar de ignorar la angustia es conformista.
ResponderEliminarMás vale entender por qué estamos angustiados y hacer algo contra ello.
Muy de acuerdo con vos. Nos educan para conformarnos y nos distraen con nimiedades que no nos dejan ver la real solución de los verdaderos problemas.
Hay un complot tácito.
Así es, Belén. La angustia tiene mala prensa. Ya ni tristes podemos estar. Hay que reírse todo el tiempo y siempre hacer cosas "divertidas". Pero eso es díficil de lograr. Y hace mal a los músculos faciales, entre otros. Gracias por escribir y opinar.
ResponderEliminarL.