Vuelvo a su cuerpo como el agua a las columnas. Huelo su carne oscura y tensa, callada sombra de un pez en movimiento. La carne es muda. Se pierde, se escapa, se corrompe. Bloquea el paso con láminas de piedra. Y yo fracaso tan lejano y lejos. A través de la Edad la carne vence al tiempo. Ella puede más. La carne tiene alas. Y sólo vuela lo que pesa.
L.
L.
La fotografía es hermosa.El blanco y negro realza la languidez de las líneas que acompaña a la profundidad del texto tambien en blanco y negro. La carne gana si cuida las alas.
ResponderEliminarGraciela B.