¿Por qué se meten los otros en mi vida? ¿Por qué todos parecen saber todo lo que me conviene hacer y deshacer? ¿Desde cuándo una persona se cree con derecho a guiar mis pasos por el camino que, supone, es el moral y políticamente correcto? Demasiados maestros para alumnos que no les pertenecen. Llegó para mí la hora de poner límites. Los quiero a todos. Pero hasta aquí llegaron.
L.
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