No sé quién soy. Nadie lo sabe en realidad. ¿Qué cosa me caracteriza? Imposible saberlo. Veo fotos a veces, escucho mi voz en grabaciones, me veo hablando en una filmación casera. No soy eso que ahí se ve. Imposible. Soy otro. Definitivamente otro. Hablo en mis cursitos acerca de lo importante que es dotarse de una voz propia. Traduzco. Si una persona emite una voz en vez de un eco, bueno, a partir de semejante acontecimiento se convierte en persona. Y esto es o sería válido para escribir, cantar, cocinar, pintar, sacar fotos y hasta para hacer el amor. Pero aún así. ¿Qué es lo propio de cada cual? ¿Cómo detectarlo? Y en caso de haber dado con lo más singular de nosotros mismos, ¿cómo darle un uso? Porque ahí está el nudo al desnudo. Lo más difícil de conseguir en esta vida es el libre uso de lo propio.
L.
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