No es común a esta altura del año ver ballenas en Valeria del Mar. Rectifico. No es común a ninguna altura del año. No se ven ballenas en esa zona. Ayer a la mañana sin embargo pude observar una que estaba situada muy pero muy lejos de la playa. Se veía de tanto en tanto cómo asomaba la cola triangular, el cuerpo inmenso, el desplazamiento del agua, con olas y todo, por efecto de sus movimientos. Junto al animal había algo parecido a ballenatos. A lo sumo serían dos. Los turistas de plástico quedaron impresionados. Algunos hasta dejaron de mirar el celular. Otros llevaron el aparato a la costa para tomar fotografías inútiles. Los chicos estaban deslumbrados. Una joven con cuerpo de sirena dijo a los gritos que para ella se trataba de una ballena perfecta. Debe tener tres metros, calculó mal. La irrupción de algo real en ese espacio fue ciertamente impactante. Era como si todos hubieran dicho por fin algo que vive. Por fin algo natural. Antes de dejar la playa me pregunté qué le pasaría al cachalote. Si se había perdido o atrasado. Si llegaría a tiempo a Madryn. Si estaba enferma o enfermo. Y en tal caso también me pregunté cuánto tiempo le quedaría de vida a la vida.
L.
No hay comentarios:
Publicar un comentario