miércoles, 13 de enero de 2010

El amor no tiene explicación


Las cosas hermosas -por ser hermosas- no tienen sentido. Una mujer que nos atrae (o el hombre que atrae a una mujer), la orilla del mar, el viento, la luz amortiguada. ¿Qué decir sobre eso? ¿Cómo explicarlo? Hay algo banal e intraducible en la felicidad. Hasta que no agoniza el fuego del hogar –dice un poema clásico- no buscamos la amistad de las estrellas. La idea de que sólo interesan lejanías cuando se apaga el deseo carnal (el fuego del hogar) es falsa. El deseo no se apaga. Los versos citados no fueron escritos para decir algo importante. Son hermosos porque sí. El amor –por ser amor- no tiene sentido. La poesía, como el amor, no debe significar sino ser.
L.

3 comentarios:

  1. Usted no es Luis Gruss, es Luis Groso. Hacía rato que no me pasaba por acá y me encantó este post y el de los ciclistas anarquistas.
    ¡¡¡Muerte al Estado automotor!!!

    Fraternal abrazo

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  2. Hay algo banal e intraducible en la felicidad.

    Eso es!

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