lunes, 6 de octubre de 2014

Pensar la vida


Natalia, una lectora del blog nacida en la ciudad argentina de Rosario, me pide que no cierre este espacio porque los textos aquí publicados la ayudan a sentir y pensar la vida de maneras inesperadas, intensas y perturbadoras. La mención al probable cierre se debe a la amenaza constante que Suspendelviaje hace de tanto en tanto pero que por ahora no concretó. No supe qué decir ante semejante solicitud. Primero le dije que el mejor espacio que conozco para pensar y repensar la vida es el psicoanálisis. Una buena terapia, le dije, es un lugar de pensamiento que todos deberían tener para sí mismos. Es un espacio de discusión privada donde sin censura alguna cada cual reescribe su historia de manera constante. Le dije a Natalia, además, que pensar y sentir la vida es peligroso. Que en ese camino uno puede cuestionarse lo que parecía perfecto e intocable. Puede ser peligroso pero necesario, contraatacó la mujer. Y remató. Prefiero cuestionar lo que parece intocable a caer en la inercia o la resignación. En fin. Habrá que seguir entonces.
L.

No hay comentarios:

Publicar un comentario