domingo, 30 de octubre de 2011
La voluntad I
Leo un reportaje al director teatral argentino Javier Daulte donde de alguna manera se confirma y amplía el post de abajo. Dice Daulte que lo principal es disfrutar de lo que se hace. Pero yo no disfruto con cualquier cosa -aclara por si acaso-. No me hago pajas. Con la metáfora sexual el entrevistado pretende subrayar acaso que cree en la posibilidad de un disfrute más profundo, es decir, en una auténtica experiencia humana que además involucre a otro. Las pajas, para seguir con la imagen elocuente, no son difíciles de concretar. Dan incluso placer. La cópula, en cambio, requiere de esfuerzo, palabras, deseo y, por encima de todo, o por debajo de todo, poner el cuerpo. Conclusión. No hay voluntad sin cuerpo.
L.
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