Acabo de hacer esa pregunta a algunos compañeros de trabajo. Cuál es tu sueño. La reacción ante la encuesta fue inicialmente desoladora. Sentí que estaban todos perturbados. Nicolás, encargado de prensa, dijo que su sueño era no tener que trabajar. César, ex motoquero, quiere vivir en el campo. Esteban, docente y escritor en crisis, quiere ser dueño de una posada en la zona cordillerana de Chubut. Una de las Lucianas (hay dos) expresó su deseo de viajar mucho. Verónica quiere irse a vivir a la playa con un hombre que en la oficina conocemos todos y que ya vive cerca del mar. Guadalupe, Maia, Inés, Alejandro no saben/no contestan. La más graciosa fue Luciana/2. Primero se enojó y me dijo que no viniera con ese tipo de preguntas justo en esta época del año en que uno se replantea todo. Después, irónica, se limitó a soñar con "ser libre y feliz". Vos y tus encuestas, añadió. ¿Qué querías? (contraataqué) ¿Que hiciera una encuesta sobre las posiciones sexuales preferidas? Su respuesta fue contundente. Esa te la contesto sin problemas. Cuál es tu sueño. Extiendo la pregunta a los lectores y visitantes eventuales del blog.
L.
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