jueves, 14 de octubre de 2010

El rescate pendiente


¿Por qué la asombrosa historia de los mineros chilenos despertó tanta ansiedad en una opinión pública por lo general desinteresada de socavones, minerales, cascos, inseguridad laboral, muertes evitables de trabajadores y asuntos afines? Puesto a pensar en la cuestión llegué a una hipótesis provisoria. Hay mucha gente que también quisiera ser rescatada. Hombres y mujeres de todos los países sueñan con una jaula que llegue hasta el fondo del agujero y los libere de algo sin nombre que los oprime. Las mujeres esperan a un divino rescatista. Los hombres fantasean con una socorrista excepcional. Todos, al igual que los 33 mineros hasta el día de ayer, desean liberarse pronto con la invalorable ayuda de una jaula.
L.

1 comentario:

  1. Es una buena hipótesis. Me recuerda a Esperando a Godot de Beckett si bien el final no es tan esperanzador como el de Copiapó. Aunque podría pensar que la jaula salvadora no hubiera tenido sentido si antes cada uno de los mineros atrapados no hubiera decidido en sí su propio rescate.
    Graciela B

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