Este blog es una insistencia. ¿Insistencia en qué? Imposible saberlo. Pero da vueltas por aquí la idea de sostener aunque no sirva para nada. ¿Y tanto esfuerzo para qué? ¿Para decir algo supuestamente importante al centenar de personas que diariamente nos visitan? ¿Para intentar un nuevo sermón de la montaña? Pareciera a veces que este blog es una militancia sin partido ni programa. O una búsqueda constante de provocar sin medir consecuencias. Pero no somos místicos. A veces perdemos la fe y pensamos levantar el campamento. Pero la sola idea de armar la carpa en otro lado, de cortar leña o salir a buscar agua nos desanima. Y entonces vuelve la idea absurda de resistir. ¿Resistir frente a qué? Imposible saberlo.
L.
Ustedes sigan con el blog sin causa ni por qué. Yo al menos lo necesito y no porque sea útil para tal o cual cosa.
ResponderEliminarSolange
"Yo, al menos, en mi simpatía por lo contradictorio —sinónimo de vida— no renuncio
ResponderEliminarni a mi derecho de renunciar, y tiro mis Veinte poemas, como una piedra,
sonriendo ante la inutilidad de mi gesto."
(O. Girondo)