martes, 7 de septiembre de 2010

Lazos


Como se sabe la lista de libros prohibidos por la dictadura incluía en lugar destacado a Le petit prince, del peligroso guerrillero y subversivo Antoine de Saint-Exupéry. Cada vez que releo ese libro entiendo mejor las razones de los militares. La prédica del principito era demasiado parecida a la de muchos de los treinta mil desaparecidos. Ellos soñaban con un mundo donde no hiciera falta comprar amigos (como si fueran cosas), un lugar más amable y menos injusto. Por eso los mataron. Le petit prince, guiado por un zorro de conocida filiación trotskista, soñaba con crear lazos de amistad real y no virtual entre las personas. Decía que sólo se conoce a quien se ama. Decía que lo esencial es invisible a los ojos (idea claramente anticapitalista) y que los hombres han olvidado verdades fundamentales como hacerse responsables de aquello que han domesticado. Proponía terminar con la cosificación de los vínculos y fundar (como también lo deseaban Jesús y el Che Guevara) un hombre nuevo, es decir, más solidario con su entorno y sus iguales. ¿Qué diría hoy el zurdito Exupéry si viviera en un mundo donde lo esencial solamente es visible en pantallas de blackberry? ¿Qué pensaría de un planeta donde los únicos lazos que se promueven conducen ya no a la libertad de amar sino a enlazar cuerpos y almas? Por suerte el principito está de vuelta en el asteroide B 612.
L.

3 comentarios:

  1. "Sólo se conocen las cosas que se domestican -dijo el zorro-. Los hombres ya no tienen tiempo de conocer nada. Compran cosas hechas a los vendedores. Pero como no existen vendedores de amigos los hombres ya no tienen amigos. ¡Si quieres un amigo domestícame!".

    Mili

    ResponderEliminar
  2. También habían prohibido las Crónicas "marxianas", de Ray Bradbury, porque creían que eran de Marx...
    (Entre nos: prefiero a Bradbury antes que al Principito...)

    ResponderEliminar
  3. Hace poco ví un documental que retraba la época de la dictadura en Argentina. La pérdida. Una mirada real de los perseguidos y de los exiliados. Lo que me llama la atención, con este post, es que muchos no se explican el porqué fueron torturados; no entienden por qué el hecho de pertenecer a la academia les trajo tantos problemas. Cuando empecé a leer el post intuía lo mismo... cuando terminé de leerlo ya lo entendía todo.

    ResponderEliminar