lunes, 29 de noviembre de 2010

La interrupción



Vivimos en la era de la interrupción. Suena un celular y la charla se congela. Algo no sale bien en la cama, coitus interruptus, desajuste espiritual o como se llame. Suena la sirena de una ambulancia (o la alarma de un auto) y el pensamiento se astilla, se fracciona, se deshace como una sombra en el agua. El beso por la mitad, la palabra cortada en diez partes, la noche romántica donde una vela se apaga para siempre. ¿No habrá más que interrupción en la continuidad? ¿O nos acostumbraremos a vivir un tiempo de barreras continuas? No puedo seguir con la idea. Alguien golpea la puerta. Mañana o pasado -dice Fernando Pessoa- te diré las palabras.
L.

No hay comentarios:

Publicar un comentario