Hay que ser muy impuro para saber qué cosa es la pureza. Hay que haberse manchado alguna vez con caca de paloma para entender el sentido de su vuelo. Hay que aceptar por fin los olores, las huellas del pie sucio, la vergonzosa humedad en las sábanas, la euforia amortiguada en el cuarto de hotel, el raro sonido del océano a las tres. Hay que ser muy impuro para saber qué cosa es la pureza.
L.
No hay nada más sucio que la pureza inmaculada. Se parece demasiado a la muerte. Muy buen post.
ResponderEliminarIrina
y aún entendiendo y aceptando, quizá la pureza no exista.
ResponderEliminarMaria Rosa