A todos nos cuesta decidir. Es más fácil esperar. Dejar pasar. Mañana digo basta, anunciamos. Por comodidad o lo que sea postergamos el gran día del portazo. No queremos ser violentos y preferimos ceder en paz. Muchas parejas siguen juntas por eso. Suponen que una ruptura sería la mayor desgracia. Peor el remedio que la enfermedad, dicen. Pero a veces conviene enfermarse de una maldita vez. La alternativa es el desamor como sistema de vida. ¿Para qué sufrir tanto? A todos nos cuesta hablar a tiempo. Y al final (por delicadeza) vendemos el alma con tal de no actuar. Conviene despertar ya del largo sueño. Si no hablamos ahora otros lo harán en nuestro lugar. Y pagaremos un altísimo precio por la gentileza.
L.
Yo estaba cegado por la confusión.
ResponderEliminarBasta.
Gracias Luis, sos un maestro.
(D) n.
La postergación también es una decisión. Tibia, desapasionada y cobarde, pero decisión al fin. Se mantiene la ilusión de que las cosas van a terminar siendo por sí mismas, la vida, el tiempo, el destino, lo hará por nosotros. Como decís Luis, otros lo harán. Vivir a través de otros es la ilusión de muchos lectores, me atrevo a decir que de todos los escritores.
ResponderEliminarMe llamó la atención: “La alternativa es el desamor como sistema de vida. ¿Para qué sufrir tanto?” … Elegirlo presupone el sufrimiento, pero le reconocemos su lugar y lo despojamos de culpas. Es un sufrimiento más lineal, acaso menos íntimo, no menos doloroso.
El dolor es madre, dicen que merece más respeto. Dicen.
J.
viene de adentro, de la formacion en casa, de una cuestion de personalidad, de agallas....es una mezcla.
ResponderEliminaren mi crecimiento alimentaron muy bien la autoestima. yo yo decrete desde niña, sin darem cuenta que: VINE A ESTE MUNDO A SER FELIZ!!
y ya esta. lo soy!! necesitas: autoestima, seguridad, personalidad, cierta inteligencia emocional, respeto, amor verdadero, saber elegir, saber poner limites. listo!!
suerte!!
yo no necisto este libro, pero si doy testimonio, la felicidad existe, yo lo soy!!