martes, 3 de agosto de 2010

Madres e hijos


Las mujeres no deberían acunar a los hombres que aman. Menos aún dedicarse a resolver sus problemas cotidianos. No deberían lavar su ropa interior. Menos aún cocinar y vestirse exclusivamente para ellos. Si se ocuparan de esas y otras tareas se convertirían en madres. Eso es riesgoso. Sus novios, maridos o como se llamen dejarían de verlas como mujeres. Eso va a notarse luego en la cama y en todo lo demás. Los hombres no deberían actuar como niños en la pareja. No pedir, no arrodillarse, no quejarse, no reclamar alimentos, ropa y atención. Si lo hicieran las mujeres dejarían de considerarlos como hombres y los verían apenas como hijos grandes. A la larga eso va a notarse en la cama y en todo lo demás.
L.

3 comentarios:

  1. Es posible que los cuidados excesivos por la persona amada lleven a veces a tal confusión. Si lo que fueron cálidos mimos cotidianos terminaron enfriando la cama creo que tiene más que ver con haber dejado mutuamente y sin darse cuenta que valiera más el plato de lentejas que la mujer-cocinera que apurada dejó su soutien negro sobre la cama, porque el marido, porque los chicos, porque la hora.Es cuestión de aprender a ver. No siempre somos lo que hacemos. Guardamos lo que fuimos y soñamos con lo que podríamos llegar a ser. A veces los vidrios se empañan.
    Graciela B

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  2. Lamento haber leido tarde este post.
    C.

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  3. Excelente.
    Abrazo
    F. Vico.

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