Cada cosa que hacemos tiene consecuencias. Llamar a alguien. Pronunciar una palabra. Escribir un mensaje y no responder a otro que recibimos. No existen los actos gratuitos. Si tendemos un puente alguien querrá cruzarlo. Si lo destruímos habrá una persona que tal vez no pueda pasar. Si golpeamos una puerta es posible que alguien abra. Y después (maldición) habrá que hacerse cargo. Atención. Hacerse cargo de algo no es bien visto. Cuidado con lo que hagas. Tarde o temprano tendrás que pagar las consecuencias.
L.
sí...a veces actuamos sin conciencia de que por todo en la vida hay que pagar peaje... vamos por el mundo como robots...hacemos daño a alguien sin pensar...nadie quiere pagar después por lo que hizo.
ResponderEliminarCualquier acto (u omisión) desencadena una serie de hechos. Algunos previsibles. Otros sorprendentes. Coincido en que lo que la mayoría desea es no hacerse responsable de esas consecuencias. Piensan que en la irresponsabilidad está la libertad.
ResponderEliminarYo creo todo lo contrario.
Lucrecia
Bueno. Ya que insisten. Voy a agitar la vida hasta la repercusión.
ResponderEliminarHermosa explicación de lo que es "hacerse grande"...uso éste recurso con mi hijo Paco, todos los actos tienen consecuencias.
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