Nada es gratis en la vida. Enamorarse da trabajo. Sostener una pareja más aún. La convivencia deviene violencia, alguien debe lavar los platos, la cama a veces resulta chica o demasiado grande. La heladera no puede estar vacía todo el día. Nada es gratis. Los diálogos son monólogos. El sexo también. Y no todas las noches son felices. Ningún trabajo de amor (por eso mismo) es perdido. Un pequeño gesto puede acabar con todo en un segundo. Entonces calma. Entonces atención. Entonces regar las plantas noche a noche (sobre todo los domingos) para que crezcan verdes y potentes. Nadie ama ni es amado porque sí. Habrá que arremangarse y esperar. Construir una pequeña flor (dice el poeta) es un trabajo de siglos.
L.
Al principio todo es fácil. Pero pasados unos meses la idea de trabajar por el amor no parece ningún delirio. Buen punto.
ResponderEliminarRulo
El amor, sí, exige trabajo. Paciencia también. Y algo parecido a la fe.
ResponderEliminarM.