jueves, 10 de junio de 2010

Amor o matrimonio II


¿Qué es más importante? ¿Durar o arder? Algunos defensores del matrimonio aseguran que el fuego es cosa de los primeros días. El enamoramiento, dicen, es un chisporroteo necesario e inmediatamente anterior al aburrimiento que también es necesario para asegurar la continuidad de la especie. ¿Durar o arder? Cabría la posibilidad cierta de arder durando…Pero eso ocurre en contadas ocasiones. En el medio interfieren los ringtones, la televisión, el grito de algún hijo, la discusión de los vecinos, el olor a bife, un mail delator que es leído a hurtadillas por la mujer o el hombre, el Mundial. Elegir una vida signada por el azar y desprovista de toda finalidad no es bien visto socialmente. Al final de la aventura no habrá ni vencedores ni vencidos. Ser feliz e infeliz al mismo tiempo es un contrasentido que no todos toleran. Se dice que un amor ajeno a las instituciones no es viable. ¿Pero quién evalúa esa viabilidad? ¿Por qué lo que todo el mundo acepta y practica es lo que está bien? ¿En base a qué criterios? ¿Por qué durar es mejor que arder?
L.

2 comentarios:

  1. Lo mejor es durar ardiendo. Pero no es fácil. Los que lo intentaron lo saben.
    A.

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  2. El matrimonio es como el facebook. Alguna vez encontré aquí una frase maravillosa que retrataba esto: "una palabra realmente pronunciada o un beso de verdad, disolverían la gran mentira colectiva"

    La verdad creo con una profunda sinceridad que en el plano individual se ha metido el colectivo, todos nos olvidamos de la poesía que resguardamos; todos nos olvidamos de ese tesoro que somos cada uno, de esa verdad que albergamos.

    No creo que la institución del matrimonio sea el problema, sino lo que carga esta palabra encima. Si lográramos que cada uno le diera un significado personal; poético, todos seríamos más felices.

    Y por esa carga que maneja esa palabra aún con todo; prefiero que se vaya para el sanitario.

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