Sostener un blog es una mezcla de castigo y salvación. Todo a la vez. Hay que estar atentos y agitar aguas dormidas. Un recuerdo basta. Una foto. Una voz oída al pasar. Siempre es difícil desnudarse en público. Sostener un blog es aferrarse a una rama y esperar que no se quiebre. Uno se queda oscilando en el oscuro corazón del bosque. A la mañana siguiente viene lo mejor. Cuando las aves de paso descubren esa rama y cantan y sueñan y se duermen.
L.
Leer este blog ya se convirtió en adicción para mí. Lo hago todas las mañanas y durante el día porque veo que suben textos de manera constante. Gracias por eso. También me aferro a la misma rama.
ResponderEliminarMika
Imagino el esfuerzo que debes hacer, Luis, para poder escribir constantemente sobre temas que son simples y complejos a la vez. Porque del amor, de la creación, de los celos, de la vida en general todos se creen expertos pero muy pocos logran hilar más de dos frases interesantes y audaces. Este blog es una grata compañía y también es un golpe en la cabeza contra el pensamiento convencional. Nada más decir que hacer un blog exige esfuerzo niega la facilidad que otros le ven al acto de expresarse.
ResponderEliminarLily
Si a veces sientes dificultad para aferrarte a esa rama, es porque (creo) todos los que andamos por aquí de alguna forma nos colgamos de ti y nos aferramos a tus palabras. La colectividad pesa , pero es solidaria.
ResponderEliminarSi caes - que no creo- caemos todos contigo.
Florisse from el norte de México
Me parece bastante curioso, Luis, que puedas mantener de una manera tan frecuente nuestras ganas incontenibles de seguir leyendo y leyendo.
ResponderEliminarMe imagino lo intenso que debe ser, pero además lo satisfactorio.
Coincido con casi todo lo que dicen todos.
ResponderEliminarCuelgo de la rama, cada día, esperando que no se rompa, pero corriendo el riesgo de que sí.