Casi todas las especulaciones que se hacen sobre la infidelidad se basan en estrictos principios morales. Pero la moral es un factor histórico y esencialmente ambiguo. No es lo mismo la imperante en la época victoriana, en el medioevo, en la Argentina o en Afganistán. Leí que para un esquimal es signo de buena educación ofrecer su mujer al viajero para que se acueste con ella. Cuando el visitante se niega el anfitrión se siente gravemente ofendido y le pega con un palo. Imaginemos la situación. Afuera hace un frío terrible. No hay calefacción en el iglú. La manera más fácil de calentarse es el cuerpo humano. La mejor de todas se concentra en la cálida piel de las mujeres. Sería absurdo proponerle al hombre que se acueste con el marido o con una foca. La actitud de los esquimales es una solución moralmente sana, generosa y principista.
L.
me gustaría imitarlos, pero...
ResponderEliminarmili
por algo ellos nacieron allá y yo acá.
ResponderEliminarA.
Es una violación a los derechos de la mujer.No hablo de infidelidad,es el derecho a poder elegir que hacer con su cuerpo y con quién.Esto tan moralmente sano,generoso y principista ,no es más que un resabio de opresión y discriminación.La cultura todo lo justifica?Hay que proponerle al viajero?,detesto la buena educación! De todas formas me gustaria oir la voz de las mujeres esquimales.Y si el visitante es una mujer ,qué pasa?
ResponderEliminarMaria Rosa
Muy certero comentario sobre los esquimales, María Rosa. Igual pensá que a veces medimos con la misma vara los comportamientos de otras culturas y eso no siempre resulta. Pensá también en lo que digo sobre "cadenas elegidas" en este mismo blog. REcién leí en "El país" que dos musulmanas que viven en España (y a las que se les ha prohibido salir a la calle con burka) reaccionaron mal ante ese intento de dominio cultural. "Si me prohiben que salga a la calle con burka me quedaré encerrada en mi casa para siempre", declara una de ellas. En general podría decir que no comparto el uso de burka o que un marido esquimal ceda su cama y su esposa a un viajero ocasional...¿Pero quién soy yo o cualquier otro para imponer mi parecer a un otro por decreto o, peor, por vía violenta?
ResponderEliminarL.