Me gusta mucho el blog. Por eso resolví convertirme en la seguidora número cien. Me da placer leerlos. Me dejan pensando. Me impulsan a escribir. Me dan permiso a espiar y les agradezco por eso. Por salpicarme cada día con gotitas de tormenta. A veces me dan ganas de comentar. A veces me aburre la opinología blogger. A veces los textos funcionan como disparadores y en esa transmutación radica la riqueza del cruce de caminos. No quiero caer en la vulgar felicitación. Pero creo que están escribiendo cosas extraordinarias. Pequeñas piezas de colección que deberían ser publicadas. Para mí son como una especie de retazos o, mejor, señales de vida.
Jéssica
A veces uno sabe si comentar o no. Los textos son provocadores y uno se queda pensando muchas cosas. Lo indiscutible -creo- es que uno lee y respira...
ResponderEliminarExcelente Post! Nunca había visto este experimento. Los felicito. No sobra decir que me encanta el blog, lo leo diario.
ResponderEliminarLuis, Andrea un abrazo.